TEGUCIGALPA, HONDURAS – El Ministerio Público de Honduras ha realizado una incautación significativa en las cuentas bancarias de Ebal Díaz, sumando más de siete millones de lempiras. Esta acción se enmarca dentro de una serie de investigaciones que vinculan a Díaz, conocido como CC5 en las indagatorias de la DEA, con actividades ilícitas relacionadas al narcotráfico junto a los hermanos Juan Orlando y Juan Antonio Hernández.
Lea también: Honduras en el ojo del huracán mundial: El Impacto de Juan Orlando y el Partido Nacional
Díaz, exsecretario de la Presidencia y figura prominente en los gobiernos del Partido Nacional, se encuentra actualmente bajo la protección del gobierno de Nicaragua, que recientemente le otorgó la nacionalidad para esquivar una posible extradición a Estados Unidos. Esta maniobra se produce en un contexto donde Ebal Díaz ha sido señalado por corrupción y mal manejo de fondos en proyectos habitacionales, siendo uno de los más notorios el de las casas contenedores para los afectados por las tormentas Eta y Iota.
Lea también: El oscuro destino del ‘Gato Negro’: revelan la supuesta orden de asesinato por Óscar Álvarez
Mientras tanto, el Consejo Nacional Anticorrupción (CNA) ha denunciado a Díaz por un perjuicio económico considerable en el mencionado proyecto habitacional, poniendo en evidencia las prácticas fraudulentas que caracterizaron su gestión. Estas acciones, junto con la adulteración de actas electorales, perfilan a Díaz no solo como un actor clave en la estructura política hondureña, sino también como un individuo profundamente inmerso en redes de corrupción y posiblemente, en actividades de narcotráfico.
Lea también: Marvin Ponce revela posible vínculo de JOH con la Administración Portuaria en Puerto Cortés
El caso de Ebal Díaz sigue desarrollándose en medio de un clima de creciente escrutinio sobre las acciones del Partido Nacional y sus miembros, con la comunidad internacional y hondureña observando de cerca los pasos del gobierno de Nicaragua y las decisiones del sistema judicial hondureño en este complejo entramado de política, corrupción y crimen organizado.