Espacio Conciente 
Mario Calix, Alexander Ardon y JOH
Tegucigalpa, Honduras – En un país de poco más de 10 millones de habitantes, las conexiones entre altos perfiles políticos y actividades ilícitas parecen ineludibles. La trama se complica aún más con las recientes revelaciones en el juicio en Nueva York contra el expresidente Juan Orlando Hernández (JOH), conocido por sus iniciales. Las acusaciones contra él incluyen tráfico de drogas y armas, desvelando una red de conexiones familiares y políticas que van más allá de la política.
Mario José Cálix Hernández, alias «Cubeta», primo de Jorge Cálix un prominente diputado del partido LIBRE, y conocido socio de JOH, se ha entregado a la DEA, agregando un nuevo capítulo a esta saga. Mario Cálix, un expolicía, ha sido señalado como un colaborador clave en la protección de cargamentos de drogas, vinculado tanto a Alexander Ardón como a JOH.
Vínculos Políticos y Familiares
La trama se enreda con la relación entre JOH y Jorge Cálix. Se rumoraba que JOH, durante su tiempo como presidente del Congreso Nacional y posteriormente como presidente del país, mantenía una relación cercana con Jorge Cálix para negociaciones políticas. Esta conexión se torna más sospechosa al descubrirse que la esposa de Jorge Cálix es sobrina del esposo de Hilda Hernández, hermana de JOH, fallecida en 2017. La muerte de Hilda no hizo más que aumentar las especulaciones sobre las verdaderas razones de esta cercanía política y familiar.
Jorge Cálix se encuentra en el centro de una intrincada red de relaciones familiares y políticas que ha cobrado nueva relevancia a la luz de las recientes revelaciones. Su conexión con Hilda Hernández, hermana del expresidente Juan Orlando Hernández y fallecida en 2017, profundiza las sospechas sobre las interacciones políticas en las altas esferas de Honduras. La esposa de Jorge Cálix, siendo sobrina del esposo de Hilda Hernández, añade una capa de proximidad personal a las ya complejas relaciones políticas, sugiriendo una red de influencias que trasciende lo profesional para adentrarse en lo personal y familiar. Esta cercanía con la familia Hernández ha levantado interrogantes sobre los verdaderos motivos detrás de la colaboración política entre Jorge Cálix y JOH, especialmente considerando las graves acusaciones que pesan sobre este último.
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Por otro lado, Soraya Cálix, fiscal del Ministerio Público contra el tráfico de drogas, y prima tanto de Mario como de Jorge Cálix, introduce otra dimensión a este entramado. La posición de Soraya en la lucha contra el narcotráfico, colocado al lado con las actividades ilegales de su primo Mario, pone de manifiesto las contradicciones dentro de la misma familia, evidenciando cómo las lealtades y responsabilidades profesionales pueden verse desafiadas por los vínculos de sangre. La implicación de Mario Cálix en actividades de narcotráfico y su cooperación con la DEA, contrasta marcadamente con el papel de Soraya en el sistema de justicia hondureño, presentando un conflicto de intereses que refleja la complejidad y los desafíos que enfrenta Honduras en su lucha contra el narcotráfico. La revelación de estas conexiones familiares en el contexto del juicio contra JOH no solo pone de relieve la pequeñez del círculo de poder en Honduras, sino que también subraya la profundidad de la crisis que enfrenta el país en materia de corrupción y tráfico de drogas.
Entrega y Acusaciones contra Mario Cálix
Mario Cálix se entregó a la DEA al verse amenazado de muerte, según informó Radio Globo. Su entrega fue precedida por acusaciones en un tribunal federal de Nueva York que lo vinculaban con el narcotráfico, junto al exalcalde nacionalista Alexander Chande Ardón. Cálix, considerado socio de Tony Hernández, hermano de JOH, ha proporcionado información que podría comprometer a altos funcionarios y políticos hondureños.
Incautación de Bienes y Conexiones Peligrosas
En febrero de 2019, la Operación Zeus resultó en la incautación de bienes pertenecientes a Mario Cálix y su cónyuge, en un intento de la Fiscalía Especial Contra el Crimen Organizado (FESCCO) por asegurar el comiso definitivo de estos activos. El monto no justificado asciende a más de 69 millones de lempiras, evidenciando la magnitud de las operaciones ilícitas.
Además, Mario Cálix ha sido implicado en testimonios por narcotraficantes guatemaltecos en el juicio contra Tony Hernández, reforzando su papel en el tráfico de cocaína hacia Estados Unidos. La participación de Cálix en reuniones con figuras notorias del narcotráfico, como Joaquín «El Chapo» Guzmán, subraya la profundidad de su involucramiento en estas redes.
El juicio en Nueva York contra JOH y las acusaciones contra Mario Cálix han puesto a Honduras en el centro de atención internacional, revelando una compleja red de narcotráfico que involucra a políticos de alto nivel. Mientras el país espera el desenlace de estos juicios, la esperanza de justicia y transparencia pende de un hilo, dejando a la nación en una encrucijada crítica de su historia.
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